Cómo mejorar mi autoestima
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La autoestima es el conjunto de valoraciones y opiniones sobre nosotros mismos, y a veces necesitamos saber “cómo mejorar mi autoestima”, porque a los demás los podemos ver con muy buenos ojos, y sin embargo ser muy críticos con nosotros mismo, ya sea con nuestra imagen, nuestra vestimenta, nuestra forma de relacionarnos con los demás o sobre nuestras habilidades profesionales.
En muchas ocasiones la baja autoestima es el auténtico problema que se esconde bajo síntomas psicológicos como episodios de ansiedad, de depresión, de estrés y otros que pueden conducirnos a la consulta del psicólogo, lo cual no está mal, pues nos ayudará de forma específica en nuestro caso personal.
Y aun así, si piensas que te falta seguridad en tí mismo, si te preguntas íntimamente: ¿cómo puedo mejorar mi autoestima?, a continuación te ofrecemos varios consejos y enfoques que pueden ayudarte a consolidar y aumentar tu autoestima.
¿Que necesitas para mejorar mi autoestima?
- Reflexión
- Tomar notas
- Fijarte metas
- Orientación profesional, en su caso
Instrucciones para mejorar mi autoestima
- Síntomas de aviso. Son los que te pueden indicar que tu autoestima es baja, como es la falta de seguridad en ti mismo, que no expreses tus preferencias y opiniones por miedo al rechazo o porque crees que no valen la pena, no termino las cosas porque me desmotivo, no me esfuerzo por lograr una meta porque estoy convencido de que no lo conseguiré, me dejo pisar porque no soy capaz de imponerme, no me relaciono bien con los demás porque creo que no me van a aceptar… y otros muchos síntomas caracterizados por un denominador común: no creo en mis cualidades o las valoro negativamente.
- No quiero ser perfecto. La autoestima se basa en poner en valor nuestras virtudes y cualidades positivas, y ser realistas respecto a nuestros defectos, admitiendo que no somos perfectos, al igual que nadie es perfecto, pero es que no quieres ser perfecto, lo que quieres es estar a gusto contigo mismo. Se trata de no restar un ápice de importancia a lo que hacemos bien, y analizar lo menos bueno de nuestra personalidad y de las cosas que no hacemos tan bien, para analizarlo y trabajar activamente en mejorarlo.
- Siempre positivo. Empieza a pensar en positivo. En lugar de siempre centrarte en que no puedes llevar a cabo algo, piensa en positivo, y en primer lugar, focaliza tus pensamientos y sentimientos en que te vas a esforzar, que lo vas a lograr, y que te va a ir bien.
- Metas realistas. Ponte metas a alcanzar que sean realistas y puedas cumplir dentro de lo razonable, que te parezcan fáciles de lograr. Estas serían las primeras a plantearte, con las que comprobarás que tu autoestima crece. Después pasa a ponerte otras metas algo más complejas, y así observarás que puedes lograr muchas cosas, y tener muchas satisfacciones con ello, lo que elevará el aprecio por ti mismo, consolidando tu autoconfianza.
- No te compares con nadie. Ves a otras personas que han encontrado un buen trabajo, o que se les da muy bien la carpintería o hacen amigos con facilidad. No te compares con ellas ni con nadie, porque cada uno de nosotros somos distintos, venimos de familias distintas, hemos tenido currículum diferentes, tenemos aficiones diversas, y nuestros caracteres tienen aspectos únicos que nadie tiene. Aunque no te lo creas, a muchas personas les admira cualidades tuyas a las que tú no les das importancia por estar ahi desde siempre.
Man riding a dart through the sky – Leadership and sense of purpose concept - Perdónate. Escribe una lista con todas aquellas cosas que te disgustan de ti mismo y de aquellas que de las que te culpas. Piensa sobre cada uno estos puntos y haz otra lista enumerando las cosas que vas a hacer para cambiar eso que crees que tienes que cambiar. Rompe la primera lista con esta idea en mente: eres humano, y eso significa ser imperfecto, y así es como vive todo el mundo consigo mismo, rebajando la importancia de los propios defectos. Perdónate los tuyos, es decir, tus cualidades son mayores que tus defectos, trabaja sobre estos últimos, y por eso te puedes decir sin ninguna ironía la famosa frase “Tú vales mucho”.
- Hazte voluntario. Únete a alguna organización social, sin ánimo de lucro, donde puedes trabajar como voluntario por una buena causa. Verás con rapidez como tu trabajo redunda positivamente en los grupos sociales a los que estéis ayudando tanto como en tu sensación de utilidad al prójimo. Es un acto solidario que a la vez subirá tu autoestima.
- Cuida tu aspecto. Dedica un tiempo a tu aspecto personal, desde la higiene cotidiana a la ropa que llevas, o el peinado o corte de pelo, cuidando que estés completamente a gusto con todo ello. Para tu aspecto físico, un poco de ejercicio como andar, bicicleta o nadar, te vendrán muy bien, y da lo mismo la forma física que tengas, porque el ejercicio una vez hecho te proporcionará una sensación de bienestar y de objetivo cumplido muy agradable que repercutirá en mejorar tu autoestima.
- Orientación profesional. Si crees que todos estos consejos no te pueden ayudar, porque te sigues viendo de forma muy negativa, no dudes en buscar orientación profesional. Existen distintas terapias a corto y medio plazo, como son las cognitivas conductuales o en su caso la psicodinámica, de carácter más profundo, muy eficaces para cambiar tus pensamientos negativos por un enfoque más equilibrado con el que pongas en valor tus buenas cualidades.
Consejos para mejorar mi autoestima
- Apóyate en tus amistades y familiares de más confianza. Habla con ellos de tus esfuerzos de mejorar la autoestima. Aléjate de aquellas personas que se pueden considerar “tóxicas”, es decir, cuya visión de las cosas siempre es negativa, problemática, y que no valoran a nadie en general.
- Sé tu mismo, reivindicando ante tí mismo tu derecho a tener tus propias opiniones, y no imites a nadie, pues lo mejor de tus cualidades estriba en que son ejercidas con tu propio estilo.
- No busques impresionar al resto de las personas, ni busques su aprobación, porque no la necesitas. Tu visión de las cosas es igual de buena que la de los demás, y no es lo mismo contrastarla con la de otros que aceptar la de estos sin mayor análisis ni crítica.
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