Cómo funciona el corazón

El corazón es sin duda uno de los órganos más importantes de nuestro cuerpo. Su buen funcionamiento es el que asegura que la sangre cargada de oxígeno se reparta adecuadamente por todo nuestro organismo. Además, permite que el dióxido de carbono se elimine a través de la respiración. Pero, ¿sabes cómo funciona el corazón? ¿Te lo has preguntado alguna vez?

Puede que hace muchos años que lo hayas estudiado en el colegio, o es posible que te encuentres en este momento aprendiéndolo. Sea cual sea tu caso, si quieres saberlo cómo funciona el corazón has llegado al lugar adecuado. En doncomos vamos a explicártelo. Vamos paso a paso.

¿Qué es el corazón?

Por si no lo sabías, el corazón es el órgano más importante del aparato circulatorio y se sitúa bien protegido dentro de la cavidad torácica. A ambos lados se encuentran los pulmones. De hecho las caras laterales del corazón son contiguas a los pulmones. La parte inferior, por su parte, descansa sobre el diafragma.  La cara anterior está justo detrás del esternón.

Dentro de los animales vertebrados (entre los que se encuentra el ser humano), el corazón se caracteriza por ser un músculo hueco. Este órgano se encarga de impulsar la sangre a través de las arterias para que llegue a todas las partes del cuerpo. Su principal función es precisamente esa: bombear la sangre por medio de los vasos sanguíneos.

Su forma es verdaderamente curiosa, como una especie de pirámide que permanece inclinada. Este órgano está rodeado por el pericardio, una especie de membrana fibrosa muy gruesa.

¿Sabías que el corazón humano pesa unos 300 g y suele medir lo mismo que nuestro puño? Su peso suele equivaler al 0.40 por ciento del peso corporal.

¿Cómo funciona el corazón?

Ahora que ya sabemos qué es el corazón y para qué sirve, ha llegado la hora de saber cómo funciona. ¿Estás preparado? En ese caso, sigue leyendo.

¿Cómo se divide el corazón?

El corazón se divide en 4 cavidades:

  1. 2 cavidades superiores. Estas cavidades son la aurícula derecha y la aurícula izquierda.
  2. 2 cavidades inferiores. Estas cavidades son el ventrículo derecho y el izquierdo.

Aurículas y ventrículos trabajan de manera conjunta para que la sangre se reparta por todo el cuerpo. El sistema venoso lleva la sangre a las aurículas que, a su vez, la transfieren a los ventrículos. Y estos por último se encargan de impulsarla a la circulación arterial.

Podemos dividir el corazón en dos partes:

  • El corazón izquierdo, compuesto por la aurícula y el ventrículo izquierdo. La parte izquierda del corazón se encarga de recibir la sangre con oxígeno proveniente de los pulmones. Esta sangre llega hasta la aurícula izquierda por medio de cuatro venas pulmonares. Una vez que la sangre oxigenada llega hasta la parte izquierda del corazón el ventrículo se encarga de impulsarla al resto del organismo. Para ello usa la arteria aorta que la distribuye al resto del cuerpo.
  • El corazón derecho, que está compuesto por la aurícula y el ventrículo derecho. La aurícula recibe la sangre de todo el cuerpo por medio de la vena cava superior y la vena cava inferior.

Para que el corazón funcione y bombee la sangre a todo el cuerpo necesita estar conectado con el resto del organismo. Esta conexión se consigue por medio de unos vasos sanguíneos de gran calibre que entran y salen del corazón. Estos vasos se dividen en dos tipos: las arterias y las venas. Veamos cuáles forman parte de cada uno de ellos:

  • En el corazón existen dos grandes arterias. La aorta y la pulmonar.
    • Arteria aorta. Esta arteria surge del ventrículo izquierdo. A partir de ella nacen las ramas arteriales por medio de las cuales la sangre se reparte por los órganos internos, los músculos y el resto del organismo. El tamaño de la aorta es bastante generoso. Mide unos 2.5 cm de diámetro.
    • Arteria pulmonar. Su misión es que la sangre llegue a los pulmones para que se oxigene. Está en contacto con el ventrículo derecho y, al igual que la aorta, tiene 2.5 cm de diámetro.
  • Las venas se conectan con las arterias y son las responsables de distribuir la sangre de manera correcta. Las venas que están en contacto con el corazón son las siguientes:
    • Vena cava superior. Esta vena desemboca en la aurícula derecha. Su función es transportar la sangre que proviene de los miembros superiores, el tórax, el cuello y la cabeza.
    • Vena cava inferior. Esta vena se encarga de transportar la sangre de los miembros inferiores, la pelvis y el abdomen.
    • Venas pulmonares. En contacto directo con los pulmones se encargan de transportar la sangre oxigenada que proviene de los pulmones. Desembocan en la aurícula izquierda y tienen unos 15 mm de diámetro. Mucho más pequeñas que las arterias.

Además de las venas y las arterias, el corazón dispone de 4 válvulas necesarias para poder distribuir la sangre. Estas válvulas sirven para lograr que la sangre fluya en el sentido que deben. Sin ellas la sangre circularía del revés, así que son muy importantes. Estas se localizan entre las aurículas y los ventrículos y pueden separarse en dos grupos.

  • 2 válvulas aurículo ventriculares. Estas válvulas son la válvula tricúspide y la mitral.
    • Válvula tricúspide. Se encarga de separar la aurícula derecha del ventrículo derecho.
    • Válvula mitral. Se encarga de separar la aurícula izquierda del ventrículo izquierdo.
  • 2 válvulas ventrículo arteriales. Estas válvulas son la válvula pulmonar y la válvula aórtica.
    • Válvula pulmonar. Se encarga de separar la arteria pulmonar del ventrículo derecho.
    • Válvula aórtica. Se encarga de separar la arteria aorta del ventrículo izquierdo.

Ahora que sabemos un poco cómo se divide el corazón y porqué venas y arterias está compuesto, es el momento de explicar las capas que lo forman. En total estamos hablando de 3 capas.

  1. Ya hemos hablado unas líneas más arriba de esta membrana fibrosa y muy gruesa que envuelve el corazón. Su función es sencilla: protegerlo de las estructuras que hay alrededor. Esta membrana tiene forma de saco y envuelve completamente el corazón en su interior. Esta capa llega hasta las raíces de los grandes vasos. El pericardio se divide en dos: una capa visceral, que está en contacto con el miocardio. Y una capa parietal. Entre medias de ambas capas hay un hueco conocido como cavidad pericárdica. En esta cavidad se acumula un poco de líquido el cual permite que ambas capas se desplacen adecuadamente.
  2. El miocardio es una capa muy gruesa y prácticamente representa la mayor parte del grosor del corazón. Podemos definirlo como el músculo cardiaco por medio del cual la sangre es impulsada por todo el organismo cuando se contrae. Su anchura no es homogénea. De hecho, la parte más grandota del miocardio es la del ventrículo izquierdo. El derecho y las aurículas es mucho más pequeña en comparación. El miocardio está compuesto por diferentes células. Por un lado los cardiomicitos y por otro lado las células mioendocrinas. Los cardiomicitos son células musculares contráctiles. Las células mioendocrinas por su parte se encargan de secretar el péptido natriurético atrial cuando el corazón se estira demasiado. De esta manera permite que disminuya la presión arterial.
  3. Si hemos explicado que el pericardio es una especie de saco grueso que envuelve al corazón, el endocardio es algo parecido pero una versión más fina. Esta especie de capa fina se encarga de recubrir el corazón por dentro.

Todas estas capas, válvulas, venas, arterias y partes del corazón son imprescindibles para que este órgano cumpla su función: bombear sangre.

El corazón ha de encargarse de que la sangre, rica en oxígeno y nutrientes, se expanda por todo el organismo. Para ello usa los vasos de la sangre. El corazón actúa como una auténtica válvula dentro de nuestro cuerpo. Se encarga de crear un sistema cerrado de bombeo de manera unidireccional donde la sangre se encuentra siempre en movimiento. El circuito marca hacia qué dirección ha de dirigirse la sangre para que todo funcione adecuadamente.

Los atrios son los encargados de recibir la sangre la cual regresa al corazón Los ventrículos son los que consiguen que la sangre vaya del corazón hacia afuera. Y por último no hemos de olvidar las arterias. Estas se encargan de que la sangre cargada de oxígeno llegue a todos los tejidos. Cuando la sangre llega a los tejidos estos extraen los nutrientes y el oxígeno y devuelven el resto de componentes que lo se sirven a las venas. Las venas se encargarán de que la sangre regrese al corazón.

El corazón controla todo este sistema tan ingenioso por medio de los latidos. Los latidos marcan el ritmo adecuado para bombear la sangre.

Curiosidades sobre el corazón

¿Sabías que el corazón late aproximadamente unas 115.000 veces al día? Además, por minuto suele latir una media de 80 veces. Una auténtica maravilla. Si hacemos las cuentas, esto implica que el corazón late unas 42 millones de veces al año. Y, como media, un corazón llegará a latir 3.000 millones de veces a lo largo de toda su vida.

Sin duda el corazón es el órgano que más trabaja de nuestro cuerpo. Incluso cuando estamos durmiendo él no descansa. No sabe lo que son las vacaciones.

Sin embargo el corazón puede latir de manera incorrecta por culpa de las taquicardias. Las taquicardias pueden ser de tipo exterior o interior y pueden provocar serios problemas en el organismo. Por este motivo es muy importante controlarlas.

SI quieres saber más sobre las taquicardias no dejes de leer el siguiente artículo Cómo controlar las taquicardias.

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