Cómo tratar una quemadura
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Uno de los problemas más frecuentes o accidentes domésticos más frecuentes, son las quemaduras. Quién no se habrá quemado en mayor o menor grado en un momento u otro y seguramente, de la manera más absurda o por un descuido. Una quemadura en el dedo, en el brazo, quemarse al cocinar, los brazos, manos o algún dedo con el horno, con una estufa, quemarte las manos o algún dedo con la chimenea en invierno, o en la barbacoa en verano, incluso algunos/as se han quemado en la ducha con el grifo al tener el agua caliente. Y estos al final, son sólo algunos de los casos más frecuentes, pero hay cientos de casos (en menor o mayor grado).
Hay que tener cuidado con las quemaduras y saber que estas heridas la verdad es que no solamente son muy molestas, sino que también son unas heridas muy dolorosas. En algunos casos, las quemaduras dejan marcas y cicatrices más o menos visible y las quemaduras, se clasifican en grados. Los grados es cómo se le clasifica a la gravedad de la quemadura, pudiendo ir del uno, al tercer grado.
Las quemaduras menos graves son heridas que no precisan de curaciones médicas y si se tratan adecuadamente, no dejan marcas ni ningún tipo de cicatriz. En cambio, las quemaduras graves, precisan de atención médica, con unos cuidados médicos y hay que seguir unas pautas y hacer unas curaciones concretas para que las quemaduras cicatricen correctamente y, además, en algunos casos, estas quemaduras, dejan cicatrices.
Las quemaduras, no solamente son por el contacto con el fuego. También una de las quemaduras más frecuentes, es por la exposición al sol. Y no siempre es, por las largas exposiciones al sol. Puedes quemarte con el astro rey, con poco tiempo. Porque tienes una piel muy sensible, porque estás en las peores horas (cuando el sol pega más fuerte y quema), porque tu piel no está preparada para exponerte al sol, no llevas protección, etc. En cualquier caso, las quemaduras solares, son de las más frecuentes. También van por grados.
Cómo tratar una quemadura, es muy importante. Desde simplemente, tener la piel un poco roja, hasta casos más graves, donde la piel se llena de ampollas, se despelleja, hay mareos, vómitos, insolaciones… y acaban acudiendo a urgencias para que un médico les atienda y pueda curarles las heridas. Son muy dolorosas y muy molestas, así que siempre, mucho cuidado con las exposiciones al sol. Mucha protección y cuidado con las horas donde el sol pega mucho más fuerte (Desde las doce del mediodía a las cuatro de la tarde).
Instrucciones para tratar una quemadura
- Las quemaduras se dividen en grados que dependen éstos, de la intensidad o la gravedad de las quemaduras.
- Son las quemaduras, por tanto, de primer grado, de segundo grado y de tercer grado.
- Las quemaduras que son de primer grado son las quemaduras más comunes. Por así decirlo, las menos graves. Las que no precisan de tratamiento médico y si se curan de una manera adecuada, no dejan cicatrices.
- Las quemaduras de primer grado, para que nos hagamos una idea, son las quemaduras que nos podemos hacer en casa de la manera más “tonta”. Por ejemplo, poniendo algo en el fuego, tocando una olla muy caliente, poniendo unos troncos en la chimenea, tocando sin querer la vitrocerámica encendida, cuando nos quemaduras por el sol, etc.
- La quemadura de este grado, el menos grave, son quemaduras que solamente afectan a la capa más externa de la piel.
- ¿Cómo cuidar las quemaduras de primer grado? En estos casos, bastará con aplicar agua (fría) colocando bajo el grifo y con agua fría, la zona que nos hemos quemado. Si se puede dejar unos minutos con el agua fría, mejor. Cuidado con pensar en colocar hielo, agua helada, etc. No. Y tampoco el agua caliente. Solamente fría, pero no helada. Otra cosa que recomiendan los médicos es aplicar una compresa fría a continuación. Bastará con una compresa fría o bien una bolsa de agua fría (siempre con un trapo) nunca en contacto directo con la zona afectada. Es sumamente importante hacerlo adecuadamente porque si no, la piel se quema y si tenemos en cuenta, que ya hemos tenido una quemadura sin curar, el problema puede ser mucho peor.
- Un remedio casero que es muy popular y también, muy útil y efectivo, es aplicar sobre la quemadura, aloe vera. Se puede o bien, aplicar la aloe vera directamente de la planta o aplicándola ya preparada (se vende en las farmacias y parafarmacias). ¿Cómo se aplica? Se coloca sobre la quemadura una capa de aloe vera, se coloca con cuidado, pero nunca frotando ni rascando.
- Continua siempre, tapando la quemadura. Realiza un vendaje que cubra la quemadura pero que no esté la herida muy oprimida. Deberías valorarlo tu mismo/a si necesitas taparlo (no siempre es necesario).
- Generalmente, las quemaduras de primer grado tardan en curarse entre cinco y diez días.
- En las quemaduras de segundo grado, las quemaduras siempre se terminan vendando y tapando la quemadura, así de este modo, la quemadura no se infecta.
- Generalmente, las quemaduras de primer grado tardan en curarse entre cinco y diez días.
- En segundo grado, siempre se requiere que un médico mire y evalúe las heridas. Es muy importante, para poder curarlo de la manera más conveniente, realizar una buena curación, que os dé un tratamiento y se evite en medida de lo posible, que queden cicatrices.
- Son quemaduras que presentan un aspecto rojizo, aparecen las ampollas en la piel, hay inflamación cutánea y son dolorosas o muy dolorosas. Muchas veces, requieren de medicación para sobrellevar mejor el grado de dolor.
- Las quemaduras de tercer grado: estas quemaduras son muy graves y muy, muy dolorosas. Siempre, las debe curar un médico y hay que acudir, por tanto, a un centro médico. Estas quemaduras llegan hasta la dermis, una capa inferior, por tanto, son quemaduras profundas. La piel adquiere o un color negro, oscuro, marrón, amarilla o incluso blanca. Aparece una inflamación que es visible a simple vista e incluso adquiere un aspecto seco. Al ser heridas profundas que llegan hasta las terminaciones nerviosas, presentan un índice alto de dolor y siempre dejan cicatrices.
- En casos leves de quemadura, hay que dejar que correr sobre la quemadura el agua fría durante unos minutos como mucho, quince minutos. Aliviará mucho la sensación de quemazón y rebajará un poquito la inflamación y la sensación de arder la piel y rojez.
- Ojo, repetimos que es en casos de quemadura leve. Para una quemadura ya de segundo grado, humedece una compresa, cubre la quemadura y acude rápidamente al centro médico. No tomes nada, mejor que acudas rápidamente al médico y que allí, ellos, te suministren la medicación que ellos consideren y te curen correctamente la quemadura.
- Jamás, jamás, se os ocurra romperos/petar las ampollas de las quemaduras. Es un error que todavía hoy en día, muchos/as comenten y solamente consiguen agravar mucho más el problema, aparte, de que pueden producirse infecciones y causar más dolores.
- Si aplicamos una crema/pomada para quemaduras sobre la herida, habrá que taparlo con una gasa estéril. Esto sirve para que no se vaya la pomada, para que no os manchéis y para que la quemadura no se infecte.
¿Que necesitas para tratar una quemadura?
- Agua fría, pero no helada. Tampoco utilices nunca agua caliente.
- Una compresa fría. En caso de no tener, una bolsa de agua fría o bien, en caso de no tener nada de esto, ve al congelador y coge una bolsa de guisantes o algo similar. Coge un trapo de cocina o una toalla, envuélvelo y colócalo sobre la quemadura (nunca en contacto directo con la piel porque quema).
- Vendas.
- Tiritas.
- Aloe Vera. O bien puede ser cortada directamente de la planta o comprada ya preparada en farmacia y/o parafarmacia.
- Cremas para quemaduras. Las más comunes son la crema Silviderma. Es para quemaduras y alivia mucho aparte de curar.
- Gasas estériles.
- Apósitos.
Consejos para tratar una quemadura
Nunca hay que curar las quemaduras con remedios caseros inventados como algunas cosas que se dicen o se leen del tipo: “poner sobre la quemadura mantequilla y/o margarina”, hielo, agua helada, pasta dentífrica… jamás. Empeoraremos la quemadura, tardará en cicatrizar, aportará más dolor y puede infectarse. Ante la duda, acudir al centro médico.
Si la quemadura es de un grado leve y se le aplican los cuidados y curas adecuados, no tiene porque dejar cicatriz. Eso sí, en casos graves o con una quemadura profunda, al llegar hasta la parte más profunda, siempre quedan marcas/cicatrices. Pueden ser más o menos marcadas o más vistosas o menos, pero siempre se quedan marcas.
Cuando acudas al centro médico, siempre te preguntarán por las vacunas y se asegurarán de que tengas administrada la vacuna del tétanos. En caso de que ya esté caducada o no la tengas, te la pondrán. Esta vacuna dura cinco años, por lo que, pasado este tiempo, hay que volver a aplicarla. En el caso de las quemaduras es muy importante porque la bacteria puede afectar de manera más severa en la quemadura. Así que la vacuna, es imprescindible.
